El Presidente del Comité Directivo Estatal (CDE) del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Gustavo Uribe Góngora, afirmó hoy que la estructura priista, que se soporta en un padrón electoral, no es ficticia sino de carne y hueso, y es fruto de un intenso trabajo realizado con armonía y compromiso.

Explicó que sin demeritar el trabajo de otros liderazgos, el suyo tiene muy claro que para tener éxito en cualquier programa de trabajo debe haber respeto hacia todos los actores políticos que intervienen en procesos determinados.

Agregó que por eso en el PRI se privilegia la armonía en todas las acciones.

Dijo que desde el 28 de octubre de 2018, cuando tomó posesión, empezó a trabajar con un proyecto muy claro de acercamiento con la gente, con los electorales.

Por eso ha sido muy importante en todos estos meses de trabajo reconocer las causas y los errores que llevaron al priismo nacional a perder la Presidencia de la República, gubernaturas y otros espacios.

“Tocando fondo es más fácil ver nuestros retos para seguir avanzando”, subrayó Gustavo Uribe, a quien le queda muy claro que para el priismo zacatecano la derrota de 2018 no fue tan contundente en Zacatecas como se vivió a nivel nacional.

Aquí sí hay condiciones para ganar otro proceso electoral afirmó.

También destacó que el trabajo del Gobernador y el esfuerzo de los alcaldes priistas, Diputados locales, Síndicos y Regidores y una enorme cantidad de liderazgos regionales, municipales y seccionales, han dado energía y rumbo al proyecto de recuperación política para este partido.

Advirtió que seguirá trabajando con las mismas metas y con la misma estrategia de escuchar a todos los militantes, respetar las propuestas de Sectores y Organizaciones adherentes al partido, comités municipales y líderes en general, para avanzar con mayor firmeza de cara al siguiente proceso electoral. Pero eso sí, subrayó, seguirá entregando nombramientos y constancias de participación a todos los que se vayan sumando en esta tarea, para que no quede duda que en Zacatecas hay un priismo de carne y hueso.